martes, 24 de marzo de 2015

Noche reversible.

No supe cómo reaccionar ante tal situación;  estabas tú frente a mí y lo único que pasaba por mi cabeza era besarte, besarte y nacer en tu boca, besar tu cuerpo y hacer de ti mi mayor tesoro.
¿Qué pasaba conmigo en ese momento? ¿Cómo es que al verte todo mi ser se paraliza?
Y después comenzaste tomando mi mano y acariciando mi brazo, acariciaste mi pierna y luego mi cabello.
Me dejas sin palabras y sin razón. Haces que me pierda en mil pensamientos donde te encuentras tú, tú conmigo.
Después de un largo rato, me encontraba perdida en tus brazos,  aferrada a tu costado y oliendo tu pecho mientras que en mi cabeza habían decenas de preguntas: ¿Era cierto? ¿Estaba soñando? ¿Cómo es que nos encontrábamos en esa situación cuando no me sentía lo suficientemente interesante para ti?. Pero esas estúpidas preguntas dejaron de revolotear en mi cabeza cuando, de pronto, tu boca se acercó a la mía y con un ligero impulso me encontraba besándote.
"Y mi sueño al fin dormía conmigo".

No hay comentarios.:

Publicar un comentario